• Por María de los Ángeles Huerta Del Río
En el 2018 más de 30 millones de mexicanos decidimos ir a las urnas a votar para lograr masivamente que los afanes de fraude de la mafia que estaba en el poder no pudieran volver a detener nuestro afán de cambiar el régimen político en México, y por fin echar afuera del gobierno a esa mafia neoliberal.
Fue entonces cuando, por fin. nuestro movimiento se convirtió en gobierno después de tantos años de lucha y esfuerzo social encabezado por nuestro querido Andrés Manuel López Obrador, hoy ex presidente de la nación.
Al ser gobierno, este movimiento transformador ha enfrentado retos de enorme importancia que con mucho esfuerzo y trabajo nuestro gobierno sacó adelante. De las cosas más importantes fue el cabal cumplimiento de 100 promesas que incluyeron la construcción de infraestructura social, el logro de la soberanía energética y sobre todo los programas sociales que han sacado de la miseria a más de 10 millones de habitantes en este país.
Pero como es muy claro para la mayoría de los mexicanos, los anteriores 40 años de mal gobierno no podían haber quedado completamente resueltos con solo 6 años de un nuevo gobierno transformador. Cualquiera que pensara que en sólo ese tiempo se podría terminar con toda la podredumbre que nos legó el prianato corrupto y neoliberal estaba sin duda muy equivocado. De hecho, lo que más bien hemos visto en estos últimos años de gobierno es que si bien a escala federal los esfuerzos por hacer un buen gobierno han sido constantes y muy considerables , también es cierto que en lo que a los gobiernos estatales y municipales respecta, el panorama es realmente diferente.
Muchos gobernadores de Morena y sobre todo presidentes municipales y algunos diputados y legisladores, están muy lejos de honrar los principios fundamentales que son los que deben orienten el movimiento nacional por el que tantos mexicanos hemos luchado incansablemente y con propios recursos desde hace más de 30 años. Y justo es esta reflexión la que debe ponerse al centro de nuestros cuestionamientos –y juntos preguntarnos con toda profundidad y seriedad— ¿cuáles son las mejores maneras de seguir construyendo esta transformación?
El punto fino aquí es que como sociedad y como militancia podamos reconocer y contestar con claridad qué es lo que realmente significa hoy defender los principios y el proyecto de gobierno asociado a esta 4aTrasformación.
Necesitamos debatir y llegar a conclusiones sobre cómo es que los ciudadanos que construimos este nuevo proyecto social y político llamado el gobierno de la 4ªT y su respectivo segundo piso –CAMBIO DE RÉGIMEN como bien lo ha dicho el Doctor Lorenzo Meyer—debemos actuar para defender nuestra patria.
Tenemos que organizarnos y pensar colectivamente qué debemos hacer y cómo lograr que la mafia que estaba en el poder no pueda seguir regresando e inmiscuirse en nuestro gobierno a través de ingresar al movimiento disfrazándose con piel de ovejas guindas.
Defender esta 4ª transformación es, en primer lugar, no permitir que la corrupción de los gobiernos quede impune y sin ser denunciada por los ciudadanos . Cuando Andrés Manuel dijo que los principios de nuestro movimiento son no mentir, no robar y no traicionar iba en serio, pero muy en serio .
El problema fue que la sociedad creyó que esa tarea del combate a la corrupción era de un solo hombre o de un solo gobierno . Ahí nuestro primer gran error como ciudadanos.
Un hombre solo, con un pequeño grupo de colaboradores (la mayoría honestos y de buena voluntad) trabajaron arduamente durante seis años para sentar las bases del combate a la corrupción, barriendo las escaleras de arriba para abajo, y tratando de que por lo menos los nuevos funcionarios no fueran los primeros ejecutores o instigadores de la corrupción gubernamental. Pero lo cierto es que la verdadera manera de combatir este histórico mal, es que TODOS, absolutamente todos nos involucremos activamente en denunciar esos procesos que ocurren en todos los lugares de donde nosotros estamos cerca: el trabajo, los gobiernos municipales, las instituciones de gobierno, etcétera.
En esto hemos fallado como sociedad, creyendo equivocadamente que el gobierno o los gobiernos estatales pueden con todo esto, es obvio que no, solo voltee a ver a su alrededor.
En segundo lugar, defender nuestra transformación implica una disputa por el poder , tanto en nuestras localidades como en el espacio nacional. Pero no se trata de disputar un espacio de decisiones diciendo quítate tu para que me ponga yo que soy fundador o activo participante de Morena.
Eso no puede ser suficiente. Necesitamos, como sociedad, disputar el poder de manera organizada y bien pensada, con un proyecto y una agenda y propuesta de trabajo nacional que esté realmente encaminada a pensar cuáles serían las mejores formas de resolver los problemas que todavía estamos enfrentando como sociedad. Vamos a tener que demostrar porque nosotros, ciudadanos de a pie, académicos, profesionales y gente con experiencia en diversos rubros del trabajo social y política, podríamos mejorar los índices de eficiencia en cargos que actualmente ocupan muchos que hoy, con astucia y cola larga, ocupan puestos y responsabilidades en nuestro gobierno de la transformación nacional.
De ahora en adelante quienes digan que quieren ser candidatos deberían tener un diagnóstico y un proyecto muy bien pensado de acción y de trabajo capaz de resolver los grandes males que deben ser combatidos.
En tercer lugar, tenemos que ser capaces de comunicarle a toda la sociedad dos aspectos fundamentales de esta gran transformación de la vida pública nacional: tanto los logros como los desafíos que tenemos enfrente son igual de importantes . Un desbalance en nuestra apreciación podría ser de muy fatales consecuencias.
Suficiente con ver a la denominada ‘ fachiza ’, que es totalmente incapaz de reconocer todos los grandes aciertos de esta transformación y por otra parte los seguidores muy ciegos e indiferentes que tampoco pueden reconocer que *todavía hay muchos desafíos que entre todos tenemos que seguir resolviendo .
En cuarto y último lugar, en el Movimiento Nacional de Organizaciones en Defensa de la 4aT, estamos pensando que es fundamental que las agendas de lucha locales de las organizaciones en cada parte de nuestro territorio tienen que estar bien organizadas para insistirle a los gobiernos nacional y/o locales sobre la importancia de dar buenos resultados a las peticiones de la sociedad . Se puede decir que hasta ahora ésta es la agenda principal de nuestro movimiento.
Para lograr nuestros objetivos *la organización nacional es fundamental. *
Para unirse a nuestro movimiento lo primero es mandar un mensaje con nombre completo y estado de participación al 5522996899.
A partir de ahí estaremos convocando al trabajo nacional.